Las cebollas dan un sabor y aroma especial a muchos platos.
Pueden ser utilizadas para casi todos los platos, desde las sopas a los guisos y desde ensaladas hasta platos más contundentes. Mientras que muchas personas disfrutan y aprecian el sabor de las cebollas, a pocas personas les agrada su olor.
No sólo puede molestarte que te lloren los ojos al cortar y picar cebolla, el fuente y picante aroma que las cebollas desprenden se pueden adherir a los utensilios de cocina, la piel y la respiración.
No tienes que renunciar a las increíbles propiedades además del fresco y apetitoso sabor de las cebollas. Con unos cuantos consejos simples, podrás comer y preparar la cebolla sin el olor tan fuerte e irritante, además aprenderás unos cuantos trucos para eliminar el olor a cebolla de tu casa, de las manos y de tu aliento.
¿Porqué la cebolla hace llorar y tiene un olor tan fuerte?
Todos los alimentos frescos y preparados desprenden un cierto olor cuando se cortan, pero las cebollas (nombre científico: Allium cepa), tienen enzimas conocidas como allinases. Cuando se corta la cebolla, las allinases descomponen las sustancias químicas en las células de la cebolla y forman malolientes gases de sulfuro. El azufre en sí es un elemento muy nocivo que se puede encontrar en objetos como la ceniza volcánica, la pólvora y los fertilizantes. Uno de estos gases a base de azufre, el sulfóxido de tiopropanal (C3H6OS), es bastante inestable y flota por el aire hasta que llega a una fuente de agua, como tus ojos.
Cuando el gas de sulfuro llega a los ojos, se forma una cantidad muy pequeña diluida de ácido sulfúrico. En altas concentraciones, el ácido sulfúrico se utiliza como catalizador para el procesamiento de minerales metálicos y productos de desecho. La pequeña concentración de ácido sulfúrico que se forma en tus ojos es suficiente para hacerte llorar, pero lo suficientemente débil como para no representar un riesgo significativo para la salud. El olor de los sulfuros son también muy irritantes y se adhieren a la ropa y la piel.
Cómo evitar el olor a cebolla en casa
Utiliza un procesador de alimentos: A menos que necesites cebollas enteras o en rodajas, es una buena idea picarlas o triturarlas en un procesador de alimentos o una licuadora. El ambiente cerrado mantiene los olores encerrados en el interior del contenedor, lo que significa que no tendrás que preocuparse por este aspecto. Los compuestos de ácido sulfúrico se sienten atraídos por el agua. Cuando las cebollas se parten, las células de la cebolla liberan agua, que luego re-absorbe el ácido sulfúrico.
También hay muchas herramientas en el mercado que se pueden utilizar para picar o cortar cebollas. Un cortador, mandolina o un pelador pueden cortar adecuadamente las cebollas sin la necesidad de que su aroma fuerte e irritante te molesten. Busca en grandes almacenes o en una tienda de suministros de cocina un cortador el acero inoxidable o una mandolina de buena calidad.
Enfría la cebolla: Un rato en la nevera puede ayudar a endurecer las células de la cebolla. Al enfriarla, secas el exceso de agua que se encuentra entre las capas de la cebolla. La temperatura fría también cambia los compuestos químicos que se encuentran en este vegetal, pero no altera completamente el sabor. Una cebolla fría finalmente acabará calentándose cuando se cocine o cuando se ponga a temperatura ambiente después de haber sido manipulada.
Consejos para cuando enfríes la cebolla:
- Refrigera, no lo congeles. Las temperaturas realmente frías pueden quitar el delicado y sabroso sabor de una cebolla. Mantén la cebolla en un estante de la puerta o el compartimiento para verduras de la nevera.
- Pela la cebolla primero. La piel exterior de una cebolla, que es como de papel, resiste los cambios de humedad y temperatura y mantiene el bulbo de la cebolla fresco. Para evitar que los compuestos sulfúricos estallen cuando partas la cebolla, pela la capa externa antes de refrigerarla.
- Mantén la cebolla envuelta o cubierta. Las cebollas tienen un olor muy fuerte y pueden afectar el sabor de otros alimentos que guardas en el interior de la nevera. Cuando pones una cebolla pelada dentro de la nevera o cuando vayas a guardar los restos de cebolla de una comida anterior, guárdalas siempre en un recipiente de plástico hermético. Es buena idea envolver la cebolla pelada en papel de aluminio o film transparente.
Cómo cortar o picar cebolla sin llorar
Corta la cebolla cuando esté bien húmeda y fría: Los gases de sulfuro en las cebollas desaparecen cuando ésta entra en contacto con el agua mientras la estás manipulando. La mejor manera de evitar que el ácido sulfúrico alcance tus ojos y nariz, es picar la cebolla bajo el agua, pero esta opción no es una forma práctica de preparar las cebollas.
En su lugar, debes mantener tus manos y el cuchillo que vayas a utilizar mojados y la cebolla fresca y húmeda antes de cortarla.
El calor abrirá los poros de tu piel y atrapará el olor de la cebolla en tus manos. El agua de una cebolla mojada se mezcla inmediatamente con el gas de sulfuro y esto evita que los compuestos químicos se metan en tus ojos, causando que éstos lagrimeen. Ten cuidado al manejar los cuchillos y los ingredientes húmedos, debido a que se te pueden resbalar y puedes acabar cortando tus dedos en vez de la cebolla en cuestión.
Cómo eliminar el olor a cebolla de las manos
Frota el fregadero de la cocina: Una forma de eficacia comprobada y probada para quitar los olores de cebolla de las manos es frotar el borde de un fregadero de acero inoxidable. No es un cuento de viejas. Se trata de química. Los átomos de azufre del ácido sulfúrico son atraídos por el hierro y otros compuestos en acero inoxidable. El azufre es también un producto químico muy importante en la fabricación de acero inoxidable. La química detrás de esta técnica de eliminación de olores es que los sulfuros reaccionan con el acero inoxidable haciendo desaparecer los compuestos que causan el olor en tus manos.
También podrás comprar bloques de acero inoxidable en forma de jabón en cualquier tienda de cocina. Puedes usar estos bloques de forma muy parecida a como se suelen utilizar los jabones de manos normales. Mejor aún, antes de usar un "jabón" de acero inoxidable o frotar las manos en el fregadero de la cocina, lávate las manos con agua fría y jabón para ayudar a deshacerte del olor desagradable.
Lava tus manos con pasta de dientes o bicarbonato de sodio: Otra forma de deshacerte de ese olor de cebolla tan desagradable es usar pasta de dientes o el viejo y simple truco del bicarbonato de sodio. Hay compuestos en estos ingredientes ordinarios caseros que ayudan a eliminar el olor a cebolla cruda de tu piel. El bicarbonato de sodio es un compuesto que se encuentra tanto en el bicarbonato de sodio como en la pasta de dientes y por eso ambos son eficaces en la absorción y eliminación de olores.
- Pasta de dientes. Utiliza la pasta de dientes de color blanco, no las claras tipo gel. Coloca una pequeña cantidad de pasta de dientes, más o menos del tamaño de un guisante en la palma de tu mano y frota vigorosamente y lavándote las manos con ella. Enjuaga bien la pasta para eliminar el olor a menta de tus manos.
- Bicarbonato de sodio. El bicarbonato de sodio ordinario es una herramienta de limpieza y eliminación de olores muy versátil. Para eliminar los olores que se pegan a tus manos, puedes hacer una pasta de bicarbonato de sodio con una pequeña cantidad de agua. Frota el bicarbonato de sodio en tus manos y enjuágatelas bien con agua fría.
Cómo quitar el olor cebolla del aliento
La sopa de cebolla, ensalada de cebolla fresca y otros platos de cebolla son ricos y deliciosos, pero pueden dejar un sabor maloliente. He aquí algunas maneras de eliminar el olor y sabor de la cebolla de tu aliento:
- Perejil. Esa ramita verde que decora el plato es una opción muy eficaz y refrescante para limpiar tu paladar. Puedes masticar un poco de perejil para deshacerte de ese regusto fuerte.
- Aerosol bucal. Unas pulverizaciones de un aerosol bucal con sabor a menta pueden enmascarar temporalmente el olor y el sabor de la cebolla. No vaporices demasiada cantidad ya que los enjuagues bucales pueden ser demasiado refrescantes cuando tenemos un aliento picante y podrían dañar los delicados paladares.
- Caramelos de menta. Los caramelos de mentol o fruta también hacen un buen trabajo para enmascarar el aliento a cebolla. Es un efecto de enmascaramiento del sabor y del olor duradero.
Ten en cuenta que no importa cuántas ramitas de perejil mastiques, la cantidad de enjuague bucal que utilices o cuántos caramelos pongas en tu boca, la mejor forma para deshacerte del mal aliento a cebolla es cepillarte los dientes y usar hilo dental después de cada comida.
La cebolla es un alimento muy común y beneficioso para nuestra salud, el único punto desfavorable es su olor. Con estos consejos que te hemos comentado, ya no tienes excusa para no comerte una sabrosa cebolla.
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